El Museo de los Orígenes y la Junta de Distrito de Barajas han organizado dos talleres de arqueología en el Castillo de la Alameda que se celebrarán durante el mes de julio. Esta actividad gratuita está dirigida a alumnas y alumnos de la ESO de 12 a 16 años, empadronadas/os o escolarizadas/os en el municipio de Madrid.
Las solicitudes se pueden presentar desde hoy lunes, 22 de mayo, hasta el 2 de junio en cualquier registro municipal. Si hubiera más solicitudes que plazas disponibles se realizará un sorteo el 13 de junio y los listados definitivos estarán disponibles en la Unidad de Actividades Culturales del distrito de Barajas, a partir del 15 de junio.
Se han programado dos turnos, el primero del 3 al 14 de julio, y el segundo del 17 al 28 de julio, en horario de 10:00 a 14:00 de lunes a viernes. En total se han convocado 40 plazas, 20 plazas para cada turno.
La finalidad de los talleres es ofrecer al alumnado un acercamiento a la arqueología, al trabajo arqueológico y al patrimonio histórico-artístico de una manera amena y didáctica.
Consisten en clases prácticas con metodología arqueológica, dibujos, fichas de excavación, clasificación de materiales y talleres de arqueología experimental. Los participantes tendrán la oportunidad de realizar una excavación simulada.
También habrá clases teóricas, con la explicación de los procesos en las intervenciones arqueológicas y de la historia del Castillo de la Alameda.
Se puede solicitar más información sobre los talleres en la Unidad de Actividades Culturales, Formativas y Deportivas del Distrito de Barajas a través del correo electrónico cultubarajas@madrid.es.
Enclave histórico relevante
El Castillo de la Alameda o de Barajas es uno de los escasos vestigios de la arquitectura militar del pasado siglo XV y uno de los pocos castillos que ha sobrevivido al paso del tiempo. Bajo él y su entorno, existen restos de asentamientos antiguos desde la Edad de Bronce hasta la época romana.
En el yacimiento donde está ubicado el castillo se encuentra también un edificio que se conoce como la casa del guarda, además del cementerio, un nido de ametralladoras de la Guerra Civil y el panteón de los Duques de Fernán Núñez, todos ellos dentro de un parque.