El nuevo año da comienzo y con ello la programación cultural de 21distritos que reabre sus puertas para ofrecer una atractiva oferta de actividades para todos durante los primeros meses del 2022.
La cantautora española Travis Birds aterriza en Arganzuela el 28 de enero a las 20:00 h en la Nave de Terneras del Centro Cultural Casa del Reloj, de manera totalmente gratuita hasta completar aforo, para brindarnos una charla y un micro-concierto.
En la charla podremos conocer la interesante historia de esta joven artista, que en uno de los momentos más oscuros de su vida tomó una guitarra y comenzó a componer, dando las primeras puntadas de lo que acabaría siendo el camino hacia su autodescubrimiento personal y musical. Su historia como artista comenzó en 2016 cuando publicó su primer álbum, Año X, el cual le llevaría a estrenar en 2019 su single Coyotes, que describe la evolución en las fases de una obsesión, y que fue elegida como cabecera de la popular serie ‘El Embarcadero’.
Ese mismo año se ganó el reconocimiento de la industria al formar parte del disco Tributo a Sabina Ni tan joven ni tan viejo, en el que participaron grandes artistas como Alejandro Sanz, Amaral, Robe Iniesta o Vanesa Martín. De obsesión también habla su segundo single Madre conciencia que presentó en 2021 y que tituló como La Costa de los Mosquitos.
El mes de febrero estará protagonizado por el último espectáculo de la compañía de danza La Phármaco, que presenta Somos la guerra, el II Capítulo de Bekristen/ Cristianos y en el que música corre a cargo de Sole Le Parody. La actuación podrá ser presenciada en la Nave de Terneras del Centro Cultural Casa del Reloj el día 5 de febrero de las 20:00-21:00 h de manera gratuita.
Este espectáculo pertenece a una trilogía de la compañía de danza La Phármaco, una prestigiosa escuela de baile fundada en 2009 por Luz Arcas que ha conseguido ser Premio El Ojo Crítico de Danza 2015, Premio Mejor Intérprete Femenina de Danza 2015 en Premios Lorca, Finalista Mejor Intérprete Femenina de Danza en los Max 2017 y Premio Injuve 2009. Además, las obras han adquirido un gran reconocimiento internacional siendo presentadas por diferentes países, acompañado de proyectos docentes en Europa, África, América y Asia.
Somos la guerra pretende transformar los efectos del neoliberalismo como nuevo colonialismo: sus modelos económicos, sociales y culturales, su violencia totalitaria y radical. Este discurso es puramente físico, intuitivo, inspirado en anécdotas, imágenes y referencias concretas de la vida y los orígenes andaluces de su coreógrafa.