Las cinco propuestas culturales que han sido seleccionadas en esta segunda llamada del programa Mirador Arganzuela se realizarán entre abril y noviembre de 2019 y pretenden ser una muestra de propuestas culturales de proximidad, que promueven la interculturalidad, el fortalecimiento del tejido social y fomentan el trabajo cooperativo superando la barrera entre creador/a y público.
Uno de ellos es Cyborgs de barrio, de la Asociación Ondula, que plantea una reflexión sobre el impacto de las tecnologías digitales en nuestras vidas a través de la danza, y otro, Ecosistema Arganzuela, de Carmen Haro Barba, que tratará de reconectar a las vecinas y vecinos del distrito con el barrio, a través de una práctica artística basada en la ciencia ciudadana como método de análisis del cambio climático.
Otro de los seleccionados es Arganzuela 2059. Ficciones contra el Cambio Climático, de Antonio Castaño Tierno, que gira en torno al cambio climático para trabajar sobre el calentamiento global como uno de los mayores desafíos a los que se enfrenta hoy la ciudadanía y Memento: De Arganzuela a los cuerpos que la habitan a través del tatuaje, de Helena Gallego de Velasco, una propuesta artística de mediación vecinal que propone una lectura de Arganzuela partiendo de los cuerpos que lo habitan y transforman, y sus memorias y cicatrices, a través del tatuaje como práctica.
Y por último El Plumero, de Javier Vaquero Ollero, una propuesta que abordará el rechazo dentro y fuera del colectivo LGTBI+ que ha provocado a la pluma (y otras expresiones de género disidentes), y como está llevando a una normativización, homofobia interna e incluso misoginia dentro de diferentes colectivos internos.
Cultura de proximidad
En esta segunda convocatoria, a la que se han presentado 134 propuestas, se buscaba la interpelación a agentes culturales, colectivos o artistas que quisieran iniciar proyectos en ambos distritos (el programa también incluye a Usera) fomentando la participación del tejido vecinal y favoreciendo la creación local.
Tras la llegada de las propuestas, un comité de selección mixto formado por personas del mundo de la cultura como la comisaria Julia Morandeira y María Arana del colectivo Urbanbat, una representante vecinal de Usera y otro de Arganzuela, además de trabajadores de ambas juntas municipales e Intermediae, valoró cada propuesta según las necesidades del distrito y la capacidad para generar redes y vínculos afectivos, su potencial artístico y la temática.