Una trilogía basada en la antropofagia, como movimiento cultural que se desarrolló en el Brasil de los años 20, está siendo uno de los platos fuertes del calendario que el programa cultural Veranos de la Villa ha acercado a Arganzuela en esta edición.
Esta tríada – la Trilogía Antropofágica– entre danza contemporánea, intervención cultural y acción para la participación del público, se ha repartido en tres actos nominados por su temática: Permanecer y Resistir se han desarrollado en fechas pasadas de julio en Naves del Matadero. La tercera parte, Avasallar, se ha programado para el viernes 20 de julio y sábado 21 de julio en ese mismo escenario. Una pieza dedicada a la angustia, la emergencia y el deseo y no recomendada para menores de 18 años.
Casi al mismo tiempo, el Teatro Circo Price acoge una versión en danza contemporánea del poema épico hindú Mahabharata, en uno de los trabajos más íntimos del coreógrafo Akram Khan hasta la fecha. Until the lions plantea la historia de la princesa Amba desde su perspectiva y con la expresión física del género, cuestionando la masculinidad y la feminidad y las normas sociales establecidas.
La noche justo antes de los bosques
Este sugerente título tiene la única pieza teatral que conforma este calendario cultural, con la adaptación del texto homónimo de Bernard-Marie
Koltés, como muestra de la dramaturgia que lo convirtió en autor de culto a los 41 años. La noche justo antes de los bosques ha elegido como escenario el parque de las Delicias ( rocódromo de la pasarela del parque Tierno Galván) donde se expondrá el 29 y 30 de agosto esta obra dura sobre la soledad, la desesperanza o la frustración mediante los diálogos entre dos inmigrantes.
Pero antes, el 24 de julio se podrá asistir en la plaza de Matadero al concierto multimedia de Christophe Chassol, un pianista, compositor y director musical francés, que integra en sus composiciones voces, música, sonidos e imágenes, creando piezas audiovisuales que son experiencias sensoriales completas. Presentará Six Pianos y Big Sun.
Mundos siderales, ritmos electrolatinos y noches estrelladas
El distrito también ha acogido otras piezas de danza contemporánea como Crowd (Multitud), de la coreógrafa francesa Giséle Vienne que plasma las emociones colectivas a través de los movimientos y relaciones en una fiesta de jóvenes. Y la música electrónica ha inundado el patio del Matadero de la mano de ‘Señor Coconut’ que casi inauguró esta edición en Arganzuela con su ritmos electrolatinos.
Aunque el evento de apertura de Veranos de la Villa ha sido la celebración del Día del Asteroide, que permitió una noche de observación de cielos y estrellas en el parque Tierno Galván, amenizados por las conferencias de expertos del Planetario (ubicado en el mismo parque) y la proyección de 2001: Odisea del espacio, de Stanley Kubrick, referente del cine de ciencia ficción. En este mismo espacio se clausurará también este programa estival el 2 de septiembre, con una cita al anochecer con una sesión de fuegos artificiales que dirán adiós al verano.