En palabras del comisario de esta edición, Alejandro Vázquez San Miguel, este cine estival «muestra relaciones humanas en todos los ámbitos de la existencia, de la niñez a la adolescencia, o de la juventud a la madurez, dibujando paisajes nuevos en donde las edades no corresponden a nuestros prejuicios» y que, al final se convierte en «una pantalla llena de abrazos, de conversaciones, amistad y amor».
Lo que explica una cartelera variada en la que cada película hace referencia o narra historias relacionadas con las etapas vitales de los seres humanos que han seleccionado en Mirador Arganzuela e Intermediae. Unas charlas nocturnas pantalla-espectador/a con entrada libre que serán todos los viernes – 6, 13, 20 y 27 de julio y 3, 10, 17 y 24 de agosto – a las 22 horas, en el solar municipal del Paseo Virgen del Puerto, 53 esquina chulapos y con entrada libre.
La cartelera se abre el próximo viernes 6 de julio con La vida de calabacín (Suiza, 2015) una cinta de animación que narra los problemas de Calabacín, un niño huérfano, para encontrar una nueva familia. Versión doblada al castellano.
Con La chica dormida ( Australia, 2015), el viernes 13 de julio , entraremos de lleno en la adolescencia con Greta, una joven en los años 80’, que celebra sus 15 años con una fiesta con amistades y enemigos y un montón de problemas que le rondan. No recomendada para menores de 7 años y V.O. Inglés (con subtítulos en castellano).
Y de inadaptación y búsqueda de un lugar habla Rara (Chile, 2016) el drama que podremos ver el 20 de julio, donde Sara tiene problemas en el colegio y unos padres aburridos. Pero con 13 años, eso no tiene nada que ver con el hecho de que su mamá viva con otra mujer. No recomendada para menores de 12 años y recomendada para el fomento de la igualdad de género.
Éxilios, asilos y huidas
Los problemas de la entrada en la edad adulta estarán representados por Todos queremos algo ( Estados Unidos, 2016), para el viernes, 27 de julio, en la que un grupo de jugadores de béisbol a punto de ingresar en la universidad, son conscientes de que las obligaciones de la edad adulta son ya ineludibles. Y Converso (España, 2017), un documental que ahonda en la familia, la fe y la búsqueda personal que se proyectará el 3 de agosto.
Y casi todo el mes restante, esta filmografía nocturna se centrará en las dificultades de la edad adulta y la vejez con exponentes como El otro lado de la esperanza (Finlandia, 2017) para el 10 de agosto que, a través de la comedia, plantea la ansiedad de los refugiados y su nueva vida; Últimos días en la Habana ( Cuba, 2016) también plantea las dudas e incertidumbres de Miguel, que desde el corazón de la Habana sueña con vivir en Nueva York hasta que llega el visado que le permite salir de la isla.
Y la cinta Paterson (Estados Unidos, 2016) cierra este ciclo el viernes 24 de agosto, con la íntima historia de un conductor de autobús y poeta aficionado sobre las pequeñas cosas que vive en Paterson, New Jersey.