• En Madrid hay disponibles tres viviendas en alquiler social por cada mil habitantes frente a las 39,2 de media en otras capitales europeas.
• La portavoz socialista en Urbanismo, Mercedes González ha subrayado el “fracaso” de la política de vivienda desarrollada por el Partido Popular en 26 años de gobierno en la ciudad y ha calificado los PAU´s de “verdaderos vertederos de viviendas”, que no han solucionado las dificultades de acceso a un piso.
Madrid, 28 de noviembre de 2016.-
El Grupo Municipal Socialista ha logrado el apoyo del Pleno del Ayuntamiento de Madrid para dar luz verde a su propuesta de aumentar la vivienda protegida y los pisos de alquiler social hasta llegar al 20% del parque inmobiliario disponible, como sucede en Viena, Ámsterdam o París.
“La proposición debe ser compleja –ha indicado la portavoz socialista de Urbanismo y defensora de la iniciativa en el pleno, Mercedes González- porque ni el Partido Popular ni Ciudadanos han querido enterarse de qué va y han preferido venir a este Pleno a soltar kilos de demagogia”.
González ha lamentado que los grupos encabezados respectivamente por Aguirre y Villacís hayan evitado apoyar una propuesta que mejorará notablemente el acceso de los madrileños a un piso. “Entiendo que defienden tanto la propiedad que por eso vendieron las viviendas de la EMVS a un fondo buitre”, ha dicho la concejala al Partido Popular, a quien también ha afeado que de las 150.000 viviendas prometidas por Aguirre siendo presidenta regional, únicamente se levantaron 15.000 y 3.000 siguen vacías.
La portavoz socialista ha agradecido al gobierno de Ahora Madrid el apoyo a su iniciativa, aunque le ha recordado que sigue habiendo “determinadas cosas que no se están haciendo”. Un ejemplo: la alcaldesa se comprometió a construir 4.000 viviendas “ y como sigamos así no llegaremos ni a las 400”, ha añadido González.
“Los 26 años de gobiernos de la derecha en la ciudad de Madrid han sido un absoluto fracaso en vivienda que nos deja un panorama desolador”, ha opinado González. A su juicio, el modelo de la derecha se ha basado durante décadas en la reducción de políticas de acceso a la vivienda, a la par que fomentaba la compra de pisos incluso entre las familias con insuficiente capacidad económica para ello. “Esto es un hecho diferencial de Madrid con respecto a otras ciudades de la Unión Europea”, en las que la ratio de vivienda en alquiler social supera las 39 casas por cada mil habitantes, frente al raquítico 3 por mil de Madrid.
La propuesta socialista se estructura en siete ejes, que muy resumidos son: impulsar el parque público de vivienda en alquiler, constituir un fondo social de vivienda, potenciar el Servicio Municipal de Alquiler para optimizar el parque residencial de vivienda desocupada y modificar el reglamento de la EMVS para adecuar la oferta de vivienda en alquiler al cambio de composición de los hogares.
Asimismo, la proposición del PSOE quiere promover un Plan de Investigación sobre Vivienda para implementar la eficiencia energética en la rehabilitación y la construcción de nuevos pisos, a la vez que se crea un Observatorio de Vivienda de la Ciudad de Madrid. Finalmente propone que se establezcan medidas de fomento del alquiler a través de una renta de emancipación para menores de 35 años y deducciones fiscales para los arrendatarios y ayudas para arrendadores de viviendas desocupadas, éstas con la colaboración del Gobierno de España y de la Comunidad de Madrid.