El recorrido de las propuestas ciudadanas “Madrid 100 % sostenible” y “Billete único para el transporte público”, después de la votación en la que 188.665 y 198.905 personas aprobaron ambas cuestiones, respectivamente, continúa.

En el proceso que siguen las propuestas, está previsto que se hagan informes técnicos sobre la legalidad, viabilidad y coste económico de llevarlas a cabo en un plazo máximo de un mes, en los que se implica a las personas que han lanzado la propuesta y a técnicos del Ayuntamiento.

Ese momento ha llegado para Madrid 100% sostenible y el billete intermodal, y esta semana está teniendo lugar la primera toma de contacto para que las personas proponentes y el Ayuntamiento de Madrid tracen el camino a seguir para transformar estas propuestas ciudadanas en iniciativas municipales, es decir, en políticas propias del consistorio.

«Ha sido una primera reunión para situar el tema y ver qué hay en las cabezas tanto de la sociedad civil como de los técnicos que se enfrentan a esas ideas y ver cómo avanzar», ha relatado el director del proyecto de Participación del Ayuntamiento de Madrid, Miguel Arana.

«Se entiende que es un plan a largo plazo, de grandes medidas que se van a ejecutar en la ciudad«, explica Arana sobre ‘Madrid 100% sostenible’. Subraya, además que se pretende que «la sociedad camine hacia la sostenibilidad».

Así ve el proceso Alianza por el Clima

Para una de las asistentes al grupo de trabajo, Sara Pizzinato, encargada de la campaña de energías renovables en Greenpeace España, el camino para llegar a la votación y la propia decisión de la ciudadanía han sido una «prueba de fuego».

La votación de Madrid es un mecanismo democrático nuevo

«Prueba para ver si realmente la gente apoyaba ‘Madrid 100% sostenible’ o no, con un mecanismo mucho más estructurado y mucho más formado», explica Pizzinato, quien sentencia «no es solo un voto por internet, es un mecanismo democrático nuevo».

La responsable de Greenpeace España considera que el reto de este proceso es que «la visión estratégica esté por encima de todo» e ir más allá de las 14 medidas que plantearon en su propuesta.

En este sentido, cree que hay medidas «muy fáciles» y otras que ya se están haciendo requieren «más valor» y que se extiendan a todo el Ayuntamiento. «Hemos visto al Ayuntamiento con ganas, así que vamos a ver cómo van los próximos pasos», ha finalizado.

El futuro de las propuestas ciudadanas

Está previsto que haya un informe de base para llevar a cabo las políticas propuestas dentro de un mes. «Tiene que servir para responder a esas personas que han dicho que esto es lo que hay que hacer», ha sentenciado Arana.

En caso de que haya puntos considerados inviables o que no exista competencia, técnicos y proponentes tienen que elaborar una propuesta alternativa con el espíritu y objetivos de la propuesta original y plantear acciones para que las lleve a cabo el Ayuntamiento. Es la consecuencia de la voluntad de lo que han expresado los votantes.