A partir del año próximo quedarán prohibidos muchos de los plásticos que usamos de manera cotidiana

 

El 1 de enero de 2021 entrará en vigor la Directiva Europea del Parlamento y del Consejo (UE 2019/904) por la cual quedarán prohibidos ciertos plásticos de un solo uso en todo el territorio comunitario.

 

Este acuerdo de ley nació inspirado en la anterior Directiva Europea que prohíbe las bolsas de plástico en los comercios (Directiva 94/62/CE) y en la actual Estrategia europea para el plástico en una economía circular, respondiendo por ello, a que el plástico, sometido a un lento proceso de descomposición, se acumula en mares, océanos y playas y es ingerido por tortugas, focas, ballenas, aves, pescados y mariscos, de forma que termina en la cadena alimenticia llegando a nuestros organismo e impregnando todos los rincones del planeta.

 

 

El plástico es un material ligero, barato y útil. Pero los efectos de los residuos de plástico en el medio ambiente y en nuestra salud son globales y pueden ser drásticos. Aproximadamente el 80 % de los desechos marinos se componen de plástico y a menudo afectan a la vida marina y las aves.

Un problema global de cuyas consecuencias no estamos exentos los seres humanos

Fruto de la gran eliminación de plásticos en medios naturales están apareciendo cantidades preocupantes de los llamados microplásticos.

 

Los microplásticos no entran directamente en el ámbito de aplicación de la presente Directiva, sin embargo se afirma desde la propia institución comunitaria que se adoptará un planteamiento global sobre este problema alentando a todos los productores a limitar estrictamente los microplásticos en sus fórmulas a fin de paliar la actual situación.


¿Puede el medio ambiente asimilar todos los desechos plásticos que eliminamos?

 

Estos son algunos de los preocupantes datos que recoge el estudio:

Una trampa del plástico. Liberando de plástico el Mediterráneo, elaborado por WWF.

El mar Mediterráneo alberga cada año 27 millones de toneladas de plástico. España es el segundo país y el primero de la Unión Europea que más plásticos vierte en sus aguas: ocho millones de toneladas cada año.

El estudio destaca los efectos dramáticos del uso excesivo de plásticos, las debilidades de los sistemas de gestión de los residuos y el turismo de masa que se están produciendo en una de las regiones más visitadas del mundo, el mar Mediterráneo. Además, basándose en los últimos datos y evidencias científicas del uso de los plásticos en Europa y en las diferentes maneras en las que amenaza a la vida marina, el informe presenta una detallada hoja de ruta de las acciones urgentes que instituciones, empresas y ciudadanos deben llevar a cabo para evitar que los plásticos lleguen al mar.

 

Los materiales plásticos pueden permanecer durante siglos en los ecosistemas marinos y terrestres mientras continuamos desechando cada vez más residuos.

Ciclo de vida de los plásticos eliminados en aguas marinas. WWF.

El tiempo apremia y nuestro entorno no puede seguir acumulando más basura

¿Qué medidas contempla la nueva Directiva Europea en relación a los plásticos?

 

La normativa de la Unión Europea afectará a aquellos productos de plástico de un solo uso, además de a los aparejos de pesca perdidos y abandonados. Todos estos residuos se han considerado como los más contaminantes de las playas y los mares de Europa.

 

Actualmente, fabricamos productos que a veces solo usamos unos minutos empleando un material diseñado para durar cientos de años. Es necesario un cambio urgente en la forma en que diseñamos, fabricamos, usamos y desechamos los productos de plástico. En respuesta a esto, la Unión Europea está desempeñando su papel en la lucha contra la contaminación por plástico y los desechos marinos.

 

Estos son los productos plásticos de un solo uso que quedarán prohibidos a partir del próximo año:

Estos artículos deberán fabricarse con materiales más sostenibles o bien remplazarse por alternativas reutilizables. También se prohibirán todos los productos fabricados con plásticos oxodegradables.

La presente Directiva pretende fomentar los planteamientos circulares que dan prioridad a los productos reutilizables, sostenibles y no tóxicos y a los sistemas de reutilización frente a los productos de un único uso, con el objetivo primordial de reducir la cantidad de residuos generados.

 

¿Qué alternativas sostenibles tenemos?

 

Como consumidores podemos implementar sencillas acciones en nuestro hogar como: comprar a granel, utilizar botellas reutilizables, llevar la comida al trabajo en fiambreras de metal o vidrio, o sustituir los utensilios de plástico por otros de madera o bambú.

 

La transición hacia una economía más circular exige que los ciudadanos nos comprometamos activamente a cambiar nuestros patrones de consumo. El método de la huella ambiental de los productos (HAP) y el de la huella ambiental de las organizaciones (HAO), creados por la Comisión, pueden permitir a las empresas que hagan afirmaciones ecológicas fidedignas y comparables, de modo que los consumidores podamos elegir los productos con un mayor conocimiento de causa y responsabilidad ambiental.

 

Muchos fabricantes ya se han dado cuenta de que la lucha contra el plástico es imparable. Es sencillo encontrar en el mercado soluciones que nos facilitan la tarea de evitar el consumo de estos plásticos.

 

A continuación mostramos algunas de estas ideas que pueden impulsar un gran cambio a escala global y hacer que minimicemos nuestro impacto sobre el medio ambiente.

 

Puedes seguir informado a través del reto #ReadyToChange ¿Preparados para el cambio?  

Con pequeños gestos, entre todos podemos crear entornos limpios y libres de plásticos contaminantes.

¿Te animas a intentarlo?