No sabemos cuántas ratas, cucarachas o palomas hay en Madrid porque no hay ningún método científico para contar el número exacto. Pero sí tenemos técnicos municipales que vigilan sistemáticamente los sitios donde suelen habitar y reciben avisos de la ciudadanía para aplicar medidas de control. Estos animales siempre han vivido y van a seguir viviendo en Madrid, pero se trata de evitar que su población llegue a niveles que resulten insalubres.

Por ahora vamos bien: este año 2016 se ha producido un importante descenso en los avisos o denuncias por ‘avistamientos’ de diversas especies en nuestra ciudad, aproximadamente un 34%. La bajada sigue la tónica ya observada en el año anterior, cuando disminuyó un 15% en total. Si desglosamos los datos, vemos que el número de avisos por ratas ha bajado un 22% en el primer semestre de este año. Se ha corregido así la tendencia de la primera mitad de 2015, cuando subió un 28% frente a 2014. Celebramos también que se ha producido una disminución en un 51% de los avisos por cucaracha negra (que es como se llama la cucaracha procedente de alcantarillado).

Avisos

La tendencia a la baja en cuanto a avisos ha continuado desde el verano. Por ejemplo, en el último mes del que tenemos datos, septiembre, hubo 109 avisos por ratas, frente a los 217 del mismo mes de 2015.

La disminución en el número de avisos habla del buen hacer de los y las profesionales de Madrid Salud, que nos lo explicaban bien en un reportaje publicado este verano. Se encargan del sistema de desratización y desinsectación, que incluye diversas actuaciones para cuidar de la salud pública en nuestra ciudad. El sistema tiene un enfoque proactivo, lo que significa que además de intervenir en respuesta a los avisos ciudadanos se llevan a cabo labores de prevención. Estas son las tareas que llevan a cabo:

  • Información, educación y corresponsabilidad ambiental. Básicamente, se informa a la ciudadanía sobre cómo prevenir los factores ambientales y evitar las conductas que favorecen plagas.

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    Cebo para roedores colgado en una alcantarilla
  • Inspección y tratamiento preventivo del alcantarillado municipal. Se coloca veneno para ratas y cucarachas debajo de las tapas de las alcantarillas. En 2015 se actuó sobre 357.562 pozos (un 2% más que en 2014). Las revisiones posteriores permiten evaluar el grado de consumo por las ratas de esos cebos y, por tanto, establecer mapas de consumo en ciudad. Si se encuentran madrigueras, se tratan y también se les da seguimiento posterior. El tratamiento para las palomas es distinto: les dan de comer, pero no veneno, sino comida para atraerlas. Las cazan con una red y se las llevan a un palomar situado fuera de la ciudad.
  • Captación y gestión centralizada de todos los avisos de la ciudadanía, que se tramitan a través de Línea Madrid (010 y oficinas de Atención al Ciudadano) y en la web municipal. Los avisos por avistamientos en espacios públicos son atendidos en menos de 24h. Cuando se cierran, se utilizan como indicadores de seguimiento que ayudan a aprender patrones de comportamiento para mejorar la gestión.
  • Gestión ambiental. Implica la gestión municipal en coordinación con todos los departamentos municipales relacionados con diversos factores ambientales que pueden ser causa de problemas o que ayudan a la prevención (limpieza viaria, mantenimiento de espacios verdes, disciplina urbanística relativa a solares y edificaciones, eventuales problemas sociales, etc).

En todo caso, teniendo en cuenta el sistema instaurado en la ciudad, es obvia la importancia de la colaboración ciudadana en la obtención y mantenimiento de entornos urbanos que no sean amigables para plagas. El papel de los medios de comunicación en este sentido también es fundamental.

Para consultar datos actualizados y formas de prevención, visita la sección sobre control de la plagas en la página de Madrid Salud. En ella tienes consejos para la prevención de plagas, instrucciones sobre qué hacer en caso de avistamiento de un roedor o alguna otra especie y más información sobre las especies potencialmente insalubres que viven habitualmente en la ciudad.